Las creencias más absurdas: Top ten

(Publicado originalmente en el El Economista)

¡Pasen y vean, señoras y caballeros, niños y niñas, vagos y maleantes, parados de larga duración, meretrices y militares sin graduación, pasen y vean el asombroso mundo del circo! ¡Enanos del Brasil, mujeres barbudas, la hormiga más grande del mundo, el hombre-pantera, los hermanos Minguez y su vuelo sin motor, Mafuz el tragasables y los diez misterios más cochambrosos del mundo paranormal! ¡Pasen y vean, completamente gratis, oiga, cómo vivir con desahogo sin dar un palo al agua, cómo aprovecharse de la buena fe del ciudadano para hacerle tragar ruedas de molino sin masticar, cómo medrar socialmente, cómo pasar de juntaletras a escritor de éxito, pasen y vean…. y no olviden dejar su donativo al salir.

1. Las conspiraciones.

- ¿Sabía usted que el gobierno de los USA estuvo detrás de los atentados del 11-S?

- El hombre nunca pisó la Luna: de hecho fueron los marcianitos verdes quienes instalaron allí los milimetrados espejos usados para medir mediante láser la distancia de nuestro satélite a la Tierra.

- ¿Sabe usted cuántas clases diferentes de cáncer producen las antenas de telefonía móvil?

- ¿Sabia usted que la vacuna triple vírica causa autismo?

- ¿A que no sabía que la vacuna contra el SIDA ya está en poder de las multinacionales farmaceúticas?

- ¿Está usted preparado para la llegada del Nuevo Orden Mundial, gobernado por el club Bieldeberg y los Illuminati?

- ¿Conoce las bases militares secretas que los nazis poseen en la Antártida?

- ¿Sabe usted que nos fumigan desde el aire con nanotecnología parasitaria?



2. Las pseudomedicinas.

- La homeopatía, o de cómo vender placebo a precio de oro.

- La medicina tradicional china, capaz de salvar tantas vidas en tres milenios como la medicina moderna en sólo unas décadas.

- La quiropraxia, o de cómo un vendedor de ultramarinos pasó a ser experto sanador energético.

- La reflexología podal, o el porqué de la relación entre los juanetes y el páncreas.

- Los cirujanos psíquicos, que operan con las manos y sin anestesia, y que son capaces de extraer del cuerpo humano higaditos de pollo y otros menudillos.

- Los curanderos y sanadores, que no hacen nada sólo a cambio de la voluntad.



3. El fenómeno OVNI.

- Los etés están entre nosotros, sólo que no lo sabemos. Bueno, algunos sí lo saben. ¿Cómo? Ahhhhh….

- No hay un fenómeno más culturalmente determinado que éste. Al aparecer los primeros aviones, los ovnis asumieron la forma de aviones. En la era espacial, los ovnis tienen forma de cilindros o cohetes. La archisabida forma de platillo volante se le ocurrió a un periodista con un léxico bastante limitado.

- Las abducciones, o de cómo algunos suertudos tienen la oportunidad de viajar a través de las estrellas en naves alienígenas, eso sí, a cambio de algunos exámenes físicos bastante molestos e indignos.

- El caso Roswell, durante el cual se le pudo practicar la autopsia a un eté de goma y filmarla y hacerla pasar por un encuentro en la tercera fase, todo ello protagonizado por el autor del muñeco. Todavía hoy se considera por algunos como un testimonio invaluable de la existencia de los marcianos.

- Los crop-circles, o círculos de las cosechas, marcas geométricas que los marisabidillos identifican con la huellas que las naves alienígenas producen durante su aterrizaje. No importa que los autores de estas figuras enseñen en internet cómo hacerlas armados tan sólo con una cuerda, siguen siendo señales i-n-e-q-u-í-v-o-c-a-s de tecnología extraterrestre.



4. La cosa paranormal.

- La ubicuidad, o característica resaltable que poseen estos fenómenos y que les hace no producirse nunca en presencia de un escéptico.

- La videncia. Imágenes y adivinaciones del pasado y del futuro, aunque nunca suele funcionar con el presente, qué casualidad.

- La cámara Kirlian. Fotografía el campo magnético humano, denominado aura, y permite averiguar cosas interesantísimas, como por ejemplo si hemos cenado algo picante o los Portland Trails Blazers pasan a los play-off.

- Las pareidolias, que se dan cuando creemos ver caritas y animalitos en las nubes, y que a veces se aparecen en los suelos de las casas sin previo aviso, retratando muertos de la guerra y otras figuras más amables, como lindos gatitos. Tienen la peculiaridad que desaparecen cuando el dueño de la casa en cuestión desaparece también, vaya por dios.

- Las psicofonías. Voces del más allá recogidas por grabadoras. Se supone que antes de inventarse éstas los muertos carecían de la facultad de hablar.

- Los orbs, esos reflejos lumínicos que aparecen en las fotografías y que tienen tan intrigados a los fotógrafos profesionales.

- La ouija, que es la hermana oscura de los Juegos Reunidos Geyper, y comercializada por Parker.

- La piramidología, que le permitirá afeitarse per secula seculorum usando tan sólo una maquinilla de afeitar perpetuamente afilada.

- La criptozoología, que es la ciencia que estudia los seres y animales inexistentes y su manifiesta existencia entre nosotros. Por ejemplo, el Yeti, Nessie, el Hombre del Saco y la Bruja Piruja.



5. La astrología.

- Una de las pseudociencias más antiguas, cuyos orígenes se remontan a cuando se creía que las estrellas eran pegatinas adheridas a una tela negra llamada cielo.

- De la evidente relación entre el movimiento de los planetas y estrellas y la fecha de nuestro nacimiento; así se consiguen averiguar cosas la mar de interesantes, como por ejemplo, si somos o no buenas personas o si nos vamos a llevar al catre a la macizorra de Edurne.

- Astrología financiera, o de cómo analizar el devenir de los procesos macroeconómicos y su repercusión en nuestra sociedad, tal y como se ha demostrado con la presente crisis, tan pero tan prevista por los astrólogos de más renombre y prestigio.

- La influencia de la Luna en nuestros cuerpos de agua, ocasionando mareas internas y que el pelo nos caiga más en otoño.



6. Las terapias alternativas.

- La cromoterapia, o el arte de curar con colorines.

- La auriculoterapia, que nos enseña la estrecha relación entre el pabellón de la oreja y el reflujo gástrico, entre otras cosas estupendas.

- La naturopatía, o el arte de curar enfermedades sin estar titulado usando hierbajos, muchos de ellos tóxicos, y sin ser responsable de sus posibles efectos secundarios.

- La iridología, o de cómo curar mirando fijamente a los ojos.

- La acupuntura, que aún no se cuestiona cómo demonios se puede medir esa cosa llamada “energía chi”.

- La sanación por poliedros, o de cómo curar el cáncer de mama exponiendo las turgencias a un dodecaedro de cartón-pluma.

- La musicoterapia, porque todos sabemos que las verrugas las cura Berlioz, y ACDC produce gastroenteritis.

- Las flores de Bach, cocimientos de florecillas que sanan el espíritu y el cuerpo serrano.



7. La religión de por medio.

- Exorcistas prime-time nos muestran sus habilidades depredando a enfermos mentales y a sus familias, o a actores bien entrenados.

- Apariciones milagrosas en árboles o zarzas o montes, o de cómo privar a una multitud de creyentes de todas sus posesiones porque la santa de turno así lo exige.

- Curaciones santísimas, tan sólo por peregrinar a santos lugares en los que el mercadillo de lo sobrenatural hace su agosto todo el año, y con la connivencia del Vaticano y sus prebostes.

- Estigmatizados y ungidos, licuefacción de la sangre y otras menudencias y casquería varia.

- Adoración de santas reliquias. Si juntáramos los lignum crucisconsiderados auténticos podríamos construir una cruz de más de cincuenta metros de alzada, la apropiada para un ser supremo, dicho sea de paso.



8. Lugares mágicos.

- La Atlántida, todo un continente que se perdió y que muchos encuentran en varios sitios a la vez.

- Las pirámides de Egipto, construcciones imposibles para esclavos negros, fueron levantadas por pueblos arios superiores que en su infinito conocimiento y dominio de la técnica consiguieron alinearlas con una constelación (guau).

- Los cementerios y camposantos, lugares misteriosos en los que ni los muertos pueden descansar en paz, por obra y gracia de asustanenes con ganas irrefrenables de trucar fotos y escribir libros.

- El triángulo de las Bermudas, un invento de un tal Charles Berlitz que ignoran arriesgadamente los miles de vuelos que lo atraviesan anualmente sin más contratiempos. Un desafío a las maldiciones telúricas, está claro.

- Las casas encantadas y los sanatorios abandonados, donde parece ser que el lastre de la locura campa por sus pasillos profiriendo horrísonas blasfemias y arrastrando bolas y cadenas.



9. La sabiduría tradicional y milenaria.

- Gurúes naturistas nos recomiendan beber nuestra propia orina para limpiar el cuerpo y la mente, y salen en la tele, oiga.

- Los zahoríes, que se comunican con una varita de avellano para descubrir en el subsuelo agua, petróleo, oro o lo que se les pida.

- La meditación trascendental, o de cómo el acto de pensar puede transformarse en un acto digno de impartirse en cursillos de pago.

- El tercer ojo (sin malpensar), un invento del fontanero británico Ciryl Hoskins que se hizo pasar por lama tibetano bajo el nombre de Lobsang Rampa.

- La magia representativa, o cómo conseguir armarse de valor a base de comer testículos de tigre o manos de gorila.

- La levitación, que se imparte en la Universidad Maharishi, también llamada “el salto culisapito”, y que es una manera de menguar billeteras sin que mengüe la cara durísima de sus promotores.

- El feng-shui, según el cual la orientación espacial de su casa y de sus muebles puede repercutir en su salud física y mental (ya sabe, no oriente al Norte cuando caiga el cierzo, no le vaya a cristalizar el moco para siempre y pueda pulir diamantes con los pezones).

- Conocimientos y sabiduría milenaria llevan a algunas tribus ancestrales a descuartizar niños y comerse los pedazos con el fin de ahuyentar malos espíritus y enfrentar la enfermedad.



10. Egregios inventores.

- ¿Le interesaría saber cómo construir una jaula de Faraday con un embudo y una palangana?

- Aparatitos emisores de ondas electromagnéticas que ahuyentan ratas e insectos, y que se venden en la tele.

- Auténtica agua del Jordán embotellada, la misma que bañó a nuestro señor, comercializada por El Corte Inglés.

- Máquinas de movimientro perpetuo y de fusión fría. Ya hay varias en el mercado y sus promotores dicen que funcionan, pero incomprensiblemente ninguna multinacional les ha echado el lazo.

- Detectores portátiles de neutrinos, la envidia de la NASA y del LHC de Ginebra.

Epílogo: ¿Quiere ganar usted un millón de dólares?

La Fundación James Randi tiene depositados en su sede de Miami valores bursátiles por importe de un millón de dólares norteamericanos a disposición de todo aquel que, bajo condiciones controladas y rigurosas, pueda demostrar estar en posesión de cualquier habilidad paranormal, como la telekinesia, telepatía, videncia, etc, etc. ¿A que no adivinan quién ha ganado dicho premio desde su instauración? Acertaron: NADIE. NUNCA. JAMÁS. Cosa curiosa, ¿a que sí?

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*NOTA DEL AUTOR: no, no se asombre, amable lector. Todas y cada una de las barrabasadas expuestas en esta entrada tienen reflejo en libros, revistas, programas de radio y televisión y blogs y webs de Internet. Todas, en uno u otro momento, han sido y son tratadas y “estudiadas” por los llamados “amantes del misterio”. Todas ellas, y las que no he mencionado por olvido -que sin duda son muchísimas más- forman parte del cuerpo misteriológico de los ociosos y asombradizos que pululan por el mundo en riña permanente con la cultura y la razón. Un consejo: cuando oigan hablar de cualquiera de estas extraordinarias propuestas, frunzan el ceño, no se dejen llevar y párense un minuto a reflexionar sobre el asunto. Si después de todo ello siguen pensando que alguna de estas extravagancias puede hacer algo por ustedes es que tienen el sentido crítico por los suelos. Les recomendaría una dosis de buen escepticismo documentado y un vaso de leche caliente con coñac.